viernes, 11 de septiembre de 2015

¡Por siempre Gonchi!


#UnDíaComoHoy fallecía el piloto uruguayo "Gonchi" Rodríguez. 

Gonzalo "Gonchi" Rodríguez nació en Uruguay el 22 de enero de 1971. Orgulloso y respetuoso de sus orígenes charrúas supo llevar a lo más alto de los podios mundiales la bandera uruguaya.
Siendo hijo de un corredor, Gonzalo creció rodeado por el mundo del automovilismo. A los siete años se subió a su primera moto y a los nueve aprendió a manejar autos. A los 14 años, debutó en karting, su padre, Jorge Rodríguez solía decir: "Bueno, aquí les traigo al Pilotín". Aquel Pilotín tenía las particularidades de debutar con 14 años y marcar a fuego dos enormes atributos: condiciones conductivas que lo destacaban sobre el resto y una amplia sonrisa entre tanta cara adusta. Ya en ese entonces para Gonchi manejar era un placer.



Antes de que su padre comenzara a tirar la gorra al aire en cada triunfo, Gonchi recibía su primer reconocimiento. Una humilde plaqueta que le distinguía como la revelación del año en kart. Desde entonces muchas carreras y muchos podios los fines de semana en el Autódromo de El Pinar, dos Sudamericanos y un Mundial, el de Valance, Francia en 1989 donde estableció el récord de vueltas, récord que permanecerá de por vida.

A los 17 años, Gonzalo comenzó a intercalar el karting con Fórmula 4 y en su primer año, fue Vice-Campeón Nacional. En 1989, fue Campeón de la Ge.Mo. y como complemento corrió en autos con techo, donde ganó las "2 horas" con Mario Fontes. En 1991, nuevamente fue Vice-Campeón y comenzó a incursionar en la Formula 3 donde finalizó la temporada en quinto lugar.
Si bien en el automovilismo mundial los roles están bien definidos y los pilotos cuentan con determinados privilegios y confort, este no era el caso de Gonzalo. Él no contaba con los recursos económicos y, por ende, debió desempeñar varias funciones dentro de los equipos, por ejemplo: barrer talleres y servir de chofer en el Rally de España. Esta situación lo hizo llevar su fuerza de voluntad al máximo, todo por ser fiel a su pasión. La cruda realidad que le tocó vivir en Europa y sobre todo en los primeros años, hizo que valorara mucho más sus pequeños o grandes triunfos.


Paso a paso, fue ascendiendo por el camino del éxito. En 1992 inició su carrera internacional. Gonchi decidió jugarse por su sueño, llegar a la más alta categoría del automovilismo. Para ello viajó a España y se radicó en Madrid para competir en la Fórmula Ford, una categoría considerada bisagra para seguir avanzando en el automovilismo ibérico. Allá participo en el Team '92 de la Fórmula Ford, para pasar al siguiente año a la Fórmula Renault, al equipo FadSport. Su destino después fue Inglaterra, donde compitió para el equipo Minister International, luego pasó a la Fórmula 3 Británica.


En 1996 pasa a competir en la Fórmula 2 Británica, logrando en 6 carreras 4 segundos puestos. Ya en ese entonces el piloto uruguayo se perfilaba con gran futuro dentro del automovilismo internacional.
En 1998 llega al Equipo Astromega, a la Fórmula 3000 F1 Junior, donde a pesar de comenzar a competir a final de temporada logra terminar tercero en el campeonato. Gonzalo peleó el campeonato este año con Nick Heidfeld y Juan Pablo Montoya (ambos pilotos de F1), ganando en SPA Francorchamps.
El equipo Astromega tiene base en Bélgica y esta en la Fórmula 3000 desde 1996, siendo "Gonchi" hasta la actualidad quien ha ganado más carreras dentro del equipo.
Para "Gonchi" 1999 fue el año de su consagración como piloto, logrando ganar en el Gran Premio de Mónaco en mayo de ese año. El trazado de Montecarlo de un poco más de 3300 metros es famoso por ser un trazado muy tortuoso. Gonchi fue el primer uruguayo en tener el orgullo de escuchar el himno nacional y ver izarse la bandera uruguaya en el principado de Mónaco y, con él, 3 millones de uruguayos se emocionaron hasta las lágrimas.
Gonzalo fue protagonista indiscutido de cada carrera que disputó, deleitando a todos los uruguayos que lo miraban por televisión. Carrera tras carrera parecía que el director de cámaras fuera uruguayo ya que lo único que le importara era la carrera de Gonchi... todo eso sucedía por el estilo y la garra que ponía Gonzalo en cada carrera, como lo hizo a lo largo de toda su vida para salir adelante en el difícil mundo del automovilismo.
Mucho se podría decir sobre "Gonchi" pero lo más importante fueron sus valores, los cuales lo ayudaron a seguir cuando las cosas no salían; lo ayudaron a valorar los momentos y sobre todo a las personas que lo apoyaban y acompañaban. El ejemplo de vida que Gonzalo dejó, continúa siendo fuente de inspiración para niños y jóvenes deportistas; y para todos los uruguayos.
Bio cortesía de la Fundación Gonzalo Rodríguez.


El piloto uruguayo Gonzalo “Gonchi” Rodríguez falleció el 11 de setiembre de 1999 luego de que el automóvil que conducía, a unos 260 kilómetros por hora, perdiera el control por problemas mecánicos y se estrellara contra una de las vallas ubicada a un costado de la pista, mientras participaba de una competencia de Fórmula CART en California, Estados Unidos. Rodríguez, de 27 años de edad, falleció debido a lesiones masivas en la cabeza y el cuello. Su muerte enlutó a la competencia Shell 300 que ayer realizaba su ronda final de clasificaciones en el circuito de Laguna Seca, en la localidad californiana de Monterrey. La noticia de la muerte de Gonchi caló muy hondo entre los uruguayos.
Rodríguez había tenido problemas con el retroceso durante los ensayos libres del viernes anterior y aunque fue reparado el piloto pidió una revisión más profunda. Exactamente a la hora 12.50 de Uruguay, Rodríguez encendió su Lola Mercedes Benz y un minuto después completaba su primera vuelta de entrenamiento. Un giro después comenzaba a buscar su ritmo y luego pasaba frente a los pits para comenzar su tercer giro de entrenamiento, ya con los neumáticos cerca de su temperatura ideal y entrando en ritmo como para iniciar la búsqueda de vueltas rápidas.
Ese tercer giro fue fatal. Al llegar a una de las zonas más críticas de Laguna Seca, la conocida como el “Tirabuzón” o el “Sacacorcho”, lanzado a unos 260 kilómetros por hora, el auto no realizó la trayectoria ideal, es decir, doblar hacia la izquierda.
El Lola Mercedes Benz siguió en línea recta, sin variar su trayectoria y si bien se distingue un humo blanco proveniente de los neumáticos bloqueados en un intento desesperado del piloto por frenar la loca carrera, la cama de leca no logró disminuir la velocidad y el auto impactó frontalmente contra la valla de gomas. Luego se elevó unos 30 metros y cayó invertido detrás de las vallas sobre un terraplén de tierra.
La muerte fue instantánea. Al enterrarse la barra antivuelco en la tierra, todo el peso del auto cayó sobre el casco del piloto, desnucándolo. Inmediatamente, el equipo Penske retiró su auto de los ensayos y la sesión libre y la clasificación fue cancelada.
El piloto fue socorrido rápidamente y trasladado al Monterrey Hospital. Pero no había nada que hacer. Unos 35 minutos después el parte médico confirmaba oficialmente el deceso de Gonchi y, una hora después, el capellán de la Fórmula CART, el padre Felipe, oficiaba en la pequeña capilla de Laguna Seca una misa a la que asistieron todos los equipos.


Gonchi estaba en el mejor momento de su carrera deportiva. Sus magníficas actuaciones durante 1998 en el campeonato mundial de la Fórmula 3000 dieron sus frutos a comienzos de 1999, cuando fue considerado por los principales equipos de la Fórmula CART, al tiempo que grupos como Benetton lo integraba para prepararlo física y mentalmente para pilotear en un futuro cercano, el sueño de su vida: un Fórmula Uno.
Gonchi tuvo la oportunidad de testear, a principios de 1999, un auto de la Fórmula CART. Sus resultados fueron tan positivos que rápidamente Roger Penske le abrió la puerta para concretar ese año, un mínimo de dos carreras en la Fórmula CART estadounidense que podrían ampliarse a tres.
Un mes antes de fallecer, Gonchi debutó en la Fórmula CART, concretamente en el Gran Premio de Detroit donde dejó su huella. Además de superar en todo momento al piloto titular del equipo, el norteamericano Al Unser Jr, Gonchi se convirtió en uno de los pocos novatos en cosechar puntos el día de su debut.
Tan grande fue su motivación que aprovechando el impasse en la Fórmula Uno Junior, el joven piloto uruguayo se trasladó hacia Laguna Seca, para concretar ese domingo su segunda presentación en la CART para el equipo Penske.
Los ensayos libres del viernes y la posterior tanda de clasificación de ese día desnudaron dos realidades: la mala performance del equipo Penske y el talento del uruguayo suficiente para volver a superar a su compañero Al Unser Jr. y conseguir el 24° lugar provisional en la Grilla.
Sin embargo, el sueño no se concretó.


En abril de este año se estrenó "Gonchi: la película", que trata de la vida y la trayectoria de Gonchi.
En la película hablan sus familiares y amigos, además de varios compañeros y colegas del automovilismo que lo recuerdan con muchísimo cariño. Un documental imperdible si están interesados en la vida del piloto uruguayo, es muy emocionante y nos hace adentrarnos mucho más en lo personal de esta figura que recordamos con tanto cariño. Aquí dejamos el trailer: 



Anécdotas:
“Sin la bandera uruguaya y sin el himno, él al podio no subía”, cuenta Nani Rodríguez, hermana del protagonista, en referencia a cuando Gonchi, en 1998 y en el circuito de Spa-Francorchamps, ganó su primera carrera en la fórmula 3.000 y en el momento del podio, los organizadores no daban ni con la bandera ni con el himno uruguayo. Un hecho hasta ese momento desconocido en este tipo de competencias. Luego ganaría en Nurburgring y al otro año lo haría en Mónaco, las tres superficies más difíciles del circuito. 
El documental está plagado de frases fuertes de personajes importantes. "Yo conocí el himno uruguayo gracias a Gonchi", cuenta un italiano, fanático del corredor, en su casa de Sicilia. Un hombre que luego se hizo amigo de Gonchi y hasta se vino a Uruguay para presenciar, emocionado hasta las lágrimas, el avant première y posteriormente el estreno del documental de su ídolo. 

El joven piloto uruguayo Santiago Urrutia participará hoy y el 13 de setiembre de la última fecha del Campeonato Pro Mazda de Estados Unidos que lo tiene como único líder. Correrá en el circuito de Laguna Seca, el mismo en el que "Gonchi" tuvo el accidente fatal, y por si fuera poca coincidencia, el mismo día. En homenaje al fallecido piloto uruguayo, "Santi" correrá con una variante en el diseño de su casco, con imágenes emblemáticas utilizadas por "Gonchi", tales como las plumas y el dibujo de Speedy González. Su nuevo casco es obra de su diseñador y amigo Pablo Planchón.  
¡Mucha suerte "Santi"! 


"Santi" Urrutia junto a Nani Rodríguez, hermana de "Gonchi", presentando el casco en homenaje al fallecido piloto uruguayo.
¡Gracias a todos por leer! Espero que hayan disfrutado de este pequeño y humilde homenaje a este gran piloto uruguayo que tanto llegó a nuestros corazones por ser el primer uruguayo en tener el orgullo de escuchar el himno nacional y ver izarse la bandera uruguaya en el principado de Mónaco. ¡Por siempre Gonchi!

UPDATE 14/09: ¡SANTI URRUTIA CAMPEÓN DE PRO MAZDA CHAMPIONSHIP!

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